Discriminación Electrónica

El Gobierno de Navarra ha dado un paso más en su cruzada en favor de la "Discriminación Electrónica". Y decimos cruzada porque, al igual que aquéllas, esta también parece una auténtica obsesión. Si ya obligó a sus trabajadores a buscarse la vida para obtener el recibo de sus nóminas, ahora nos vuelve a sorprender dejándonos sin nuestro certificado de retribuciones a efectos de la declaración de I.R.P.F.

El Gobierno de Navarra dejó de enviar la nómina en papel a sus trabajadores y pasivos, obligándoles a obtenerla a través de internet. En lugar de dar la opción de elegir, aquí hacemos las cosas a golpe de maza. El asunto se denunció ante el Defensor del Pueblo pero la Administración hizo caso omiso, demostrando una vez más lo prescindible que es para ellos esa figura de nuestras instituciones, dicho sea de paso, y discriminando a aquellos trabajadores que no disponen de un ordenador en su puesto de trabajo y que se ven obligados a buscarse la vida con compañeros, vecinos, bibliotecas y civicanes. Por no hablar de quienes no controlan el manejo de estas herramientas electrónicas y se ven forzados a pedir ayuda o quedarse sin ella.

Pues bien, ahora, "continuando con la aplicación de la ley para la implantación de la Administración Electrónica", palabras textuales de Función Pública, nos anuncia que el certificado de retribuciones para la renta también lo vamos a tener que conseguir a través de internet, porque lo de imprimirlo y enviarlo por correo se ha acabado.

Así de entrada, además de una medida para la implantación de la Administración Electrónica, supongo que también será una medida de ahorro, como por cierto también lo sería suprimir aquellas instituciones que tan prescindibles se muestran, no ya a la vista de los contribuyentes, sino a la suya misma, dado que tan dados son a pasárselas por el Arco del Triunfo.

Así que nada, o acudimos nuevamente al Defensor del Pueblo para que siga gastando la pasta en resoluciones que se quedan en agua de borrajas, o nos resignamos a que, aquellos que no cuentan con los medios y conocimientos adecuados, sigan siendo víctimas de la obsesiva "discriminación electrónica" de nuestra Administración.